Ellos pueden, ¿y los humanos?
Hay ciertas razas de perros que por su naturaleza hiperactiva y juguetona no suelen llevarse de piquete de ombligo con los gatos. Sin embargo, el que “se odien” mutuamente es un mito puesto que si son criados juntos y conviven desde que son pequeños pueden volverse grandes amigos.
Perros y gatos. Ellos serían un buen ejemplo para nosotros los humanos ¿no crees? Hoy entró en vigor la muy sonada y polémica Ley Arizona y a pesar de que se anularon 3 de sus puntos más indignantes, la nueva legislación traerá consigo inevitables muestras de discriminación e intolerancia a la diversidad racial.
Solo queremos dejarlos con un pequeño pensamiento:
Si perros y gatos, dos especies completamente diferentes en personalidad y apariencia pueden convivir, respetarse y quererse…
¿Por qué a los humanos, seres con sentimientos y raciocinio, les cuesta tanto trabajo?